al que sólo puede llegar la luz de la música"
Anónimo
Gracias, Divina Música, porque a través tuyo por un momento nos liberas y nuestra alma se expande con tus sonidos formando parte de ellos. Entonces el tiempo y el espacio abren sus barrotes y experimentamos por unos momentos la vida en otras dimensiones, otro espacio-tiempo, el de los sueños Ideales.
Son instantes de éxtasis, de regreso, es tu lenguaje el de nuestra alma en íntimo y secreto diálogo con el Misterio. Qué fibras de nuestra alma tocas… qué teclas pulsas de nuestro interior, que todo, todo lo que hay en ella dormido se despierta, convocado por la magia de tus sonidos prodigiosos.
Eres como el viento que acaricia nuestro rostro al abrir las ventanas, viajero incansable que nos trae reminiscencias de otros mundos y lugares, de mil historias vividas, compartidas, con todo su sentir e intuiciones vivas, presentes de nuevo, resucitadas de sus cenizas. Eres tu…maravilloso sonido el artífice del milagro, el mago encantador que nos hace revivir tantas y tantas cosas que parecen perdidas, olvidadas, desaparecidas para siempre de nuestra vida… Más tu, nos dices una y otra vez, que todo está en nosotros, que todo existe en tu corazón, fuente que alimenta el nuestro. Simplemente se apaga o se despierta ante tu llamada, ante tu poder sin igual. Maga por excelencia.
A veces es tan fácil el encuentro mágico y maravilloso, con aquel Ser amado misterioso que esperamos y buscamos, que siempre está detrás de todo y que nunca totalmente alcanzamos, impulsándonos sutilmente siempre hacia delante.
Eres Energía y Vida para el Alma, Amor y Sabiduría para nuestro corazón cansado. Eres Belleza derramada cual rayos del Sol que alimenta nuestro Espíritu.
Eres Paz, Felicidad, Alegría, Nostalgia, Tristeza, Valor, Entusiasmo, Entrega, Sacrificio, Heroísmo, Poder y Fuerza Mágica. Puedes evocarlo todo.Eres la Voz del Misterio, su Melodía Eterna.
Gracias, Música Divina, por educarnos, fortalecernos, liberarnos por momentos. Por ayudarnos a vivir mejor con todo ello. Gracias por hacernos recordar y soñar en tus brazos. Que tus sonidos evocadores nos permitan no perdernos en este Océano de nieblas e ilusión y nos indiquen la senda hacia arriba, siempre hacia las estrellas imperecederas… tu reino y nuestra "Casa". Llámanos, llámanos, marca la escalada hacia la cima, haciéndonos recordar quiénes somos y fortaleciendo nuestra alma enamorada por siempre de tu mágica Belleza…
D.V.-Nefertum-Gijon.-1996
fragmento de LA ODISEA DEL ALMA
Propiedad intelectual
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